Nueva etapa

El Gobierno español parece estar decido a abrir una nueva etapa en el contencioso sobre Gibraltar tras estar bloqueadas las negociaciones en los tres años que llevamos de legislatura. El Ejecutivo de Mariano Rajoy está preparando los temas de las primeras reuniones ad hoc con el Reino Unido y el Gobierno gibraltareño que preside Fabian Picardo. Un giro a las relaciones que en estos tres años han estado marcadas por la tensión y por la falta de avances en la buena vecindad. 

Fabian Picardo, ministro principal de Gibraltar. 

El objetivo es progresar en los temas locales que redunden en beneficio de la colonia británica y de la vecina comarca del Campo de Gibraltar, aparcando de momento el contencioso sobre la soberanía de la colonia. Avanzar en temas como el medio ambiente, la sanidad, el tránsito por la frontera y en proyectos conjuntos que puedan beneficiar a la economía de la zona. 

Con la llegada al poder del PP en España y de Picardo en la Roca las conversaciones se congelaron. El litigio por las aguas que rodean al Peñón, el contrabando de tabaco y las colas en la frontera han sido el pan nuestro de cada día. Atrás quedó el Foro Tripartito impulsado por el Gobierno socialista de Zapatero y de Peter Caruana en el Peñón. Ahora, Rajoy, Cameron y Picardo parecen haber llegado a un punto de encuentro para sentarse de nuevo a dialogar en reuniones en las que participarán también la Mancomunidad de Municipios y la Junta de Andalucía. Una buena noticia para el Campo de Gibraltar, lastrada por el alto índice de paro, que podría beneficiarse de unas mejores relaciones con su vecino británico.  

Fundido en negro

El Campo de Gibraltar puede fundirse en negro. Cinesa, el operador del único multicine que queda en la comarca, anuncia que se marcha. La empresa señala, en concreto, que el próximo día 18 cerrará todas las salas que tiene alquiladas en el centro comercial Bahía Plaza de Los Barrios. La dirección del centro comercial ya ha anunciado que está negociando con otros operadores y que está haciendo todo lo posible para que las proyecciones no cesen. Sin embargo, mientras se llega a un acuerdo, puede que el Campo de Gibraltar se quede sin cine durante un tiempo. Sería la primera vez desde que tengo uso de memoria. 

La industria del cine lleva bastantes años en crisis en España, antes incluso de que nos golpeara la económica. La situación en la comarca es un episodio más. Gran parte de la culpa la tiene Internet y las descargas ilegales de películas. Con los nuevos dispositivos ya muchos han dado la espalda a la magia del séptimo arte y optan por la piratería obviando que esto se está cargando la industria y miles de puestos de trabajo. 

No tengo muchos años, pero en mi trayectoria vital he presenciado los cierres de todos los cines que había en el Campo de Gibraltar. A bote pronto me acuerdo del Magallanes, Lis, Baluarte (estos tres en Algeciras), Imperial, el del Prica (estos dos en La Línea) o el Alameda (en Tarifa). Ya sólo queda el del Bahía Plaza y ahora se tiene que enfrentar a un nuevo reto de supervivencia. Espero que por el bien de la comarca lo supere.  

Algeciras me gusta

Soy algecireño y desde pequeño llevo el sambenito a cuestas de que mi ciudad es fea. Y no creo que mi pueblo sea más desagradable a la vista que otros, pero los que vivimos en él hemos contribuido a alimentar esa imagen con nuestro desapego. El actual equipo de gobierno del PP, cuando inició este mandato, lanzó la campaña “Algeciras me gusta” para intentar corregir esta percepción. Esta iniciativa ha traído numerosas actividades para animar la ciudad. Sin embargo, cuando el calendario no está en rojo, los algecireños seguimos haciendo lo mismo: cogemos el coche y emigramos a los alrededores, dejando nuestras calles desiertas los fines de semana. El problema tiene difícil solución ya que tiene raíces profundas.

El PSOE, en el anterior mandato, elaboró el Plan Estratégico Algeciras 2015. Un laborioso documento que recogía todos los puntos fuertes y débiles del municipio, y marcaba la ruta a seguir en el futuro. Un futuro que ahora ya es presente por lo que el texto ha quedado en papel mojado, tanto por la inacción de los impulsores como por el desinterés del actual Gobierno local, que metió el plan en un cajón cuando llegó a la Alcaldía pese a que contaba con el consenso de las administraciones y de los colectivos sociales del municipio.

Imagen de Algeciras.

Hay cosas que ya no se pueden corregir, como el urbanismo atroz que durante décadas ha imperado en la ciudad. Pero Algeciras tiene mucho margen de mejora y su consecución depende de que los ciudadanos obliguemos a los políticos a cumplir sus promesas.

Pero tampoco podemos echarle toda la culpa a los políticos. Los ciudadanos tenemos mucho que callar. Muchos adolecemos de civismo y educación. Somos incapaces de mantener nuestras calles limpias o de cuidar el mobiliario urbano. Por ello, tenemos que cambiar de mentalidad. Porque mejorar Algeciras es responsabilidad de todos.           

Toda una inspiración

Gibraltar con su cultura, sus costumbres y su historia es el escenario perfecto para la inspiración de escritores, pintores y cineastas a nivel mundial. Este paraíso natural y fiscal como muchos lo conocen, se ha convertido en una atracción para aquellos que quieren plasmar un escenario distinto a lo cotidiano con raíces provenientes de lo real.

A lo largo de la historia muchos libros, obras y películas han usado Gibraltar como su escenario, mostrando que el estrecho que separa dos continentes no sólo es un hermoso destino turístico con paisajes deslumbrantes y ventajas fiscales, sino un territorio que a diario tiene que lidiar con conflictos de fronteras, corrupción, narcotráfico, entre otros.

Artistas como  Antonio Rojas o Juan Molino son muestra de los miles de pintores que día a día son inspirados por el estrecho; de los cuales, muchos deciden tomar sus lienzos y pinceles y mudarse a este paraíso donde sus técnicas y su arte se transforman.

Obra de Antonio Rojas

Y ya que hablamos de inspiración y de escenarios basados en Gibraltar no puedo dejar de lado a la película española El Niño que aún se encuentra en cartelera, dirigida por Daniel Monzón con escenas que te hacen sentir en medio del conflicto. Esta película, al igual que otras como The Informant del director Fránces Julien Leclercq son un vivo ejemplo de lo que podemos considerar una cruda realidad en medio de un paraíso.

El Niño: persecución aire - mar

Gibraltar, británico con acento andaluz

El Campo de Gibraltar tiene la peculiaridad de contar en su territorio con la última colonia en suelo europeo. Gibraltar es un bocado de Londres en este vértice de Andalucía, donde se mezcla la tradición británica con el tipismo español. El Peñón corona uno de los extremos de la bahía de Algeciras. España cedió Gibraltar al Reino Unido en 1713 mediante el Tratado de Utrecht. Desde entonces la disputa para recuperar dicho territorio ha sido constante, lo que no ha evitado que se establezca una peculiar relación de vecindad entre la comarca y la colonia británica. 

Gibraltar cuenta con la cuarta mayor renta per capita del mundo, lo que contrasta con el alto nivel de paro que persiste en las localidades españolas vecinas. El Peñón, por su situación de territorio de ultramar, dispone de ventajas fiscales que han relanzado su economía. España la considera un paraíso fiscal, si bien ya no figura en la lista negra de los organismos internacionales. Multitud de empresas de juego on line tienen su sede en Gibraltar. Asimismo, muchas personas cruzan la frontera a diario para comprar tabaco, alcohol u otros productos más baratos que en España. Esto ha motivado que en los últimos años el Gobierno español haya redoblado los esfuerzos contra el contrabando en la frontera, con controles más férreos que provocan a veces largas colas para entrar o salir del Peñón. 

Gibraltar acoge al año a unos 4 millones de turistas. Muchos de ellos llegan en cruceros atraídos por sus tiendas, su aire británico y su geografía. Una de sus estampas más características es la de los monos que habitan en la cumbre del Peñón, al que se puede llegar en coche o en teleférico. Las vistas desde allí son magníficas, ya que se puede contemplar toda la bahía, el Estrecho y África. Del mismo modo, son muy visitados los túneles construidos durante las guerras dentro de la Roca o sus cuevas con hallazgos prehistóricos. 

Los volaores, tradición linense

Existe una tradición en La Línea que se remonta hasta donde alcanza la memoria. Dicen los vecinos de La Atunara que nació con la propia barriada. Se trata de los volaores, ese pescado secado al sol que se vende cada verano en las calles de este rincón marinero. 

La temporada empieza con la Feria de La Línea, a mediados de julio, y dura alrededor de un mes. Una veintena de barcos pesqueros de La Atunara se echa al mar para capturar esta especie, denominada así por los saltos que dan con sus aletas. La pesca se realiza de forma artesanal con redes a la deriva. Cada embarcación suele coger entre 6.000 y 10.000 volaores. Una vez en tierra, llega el momento del secado. Primero se les corta la cabeza y se les quitan las tripas. Una vez limpios se salan y se cuelgan al sol. Llega entonces una de las estampas más características de La Atunara, la de las calles y azoteas llenas de volaores colgados de los cordeles. 

Francisco con su puesto en La Atunara.

Francisco tiene uno de los característicos puestos callejeros donde vende los volaores. Lleva unas cuantas temporadas dedicándose a esta tradición y en ésta ha capturado unos 6.000 ejemplares. Francisco explica que el proceso de secado depende del viento. Así, si es poniente, el volaor tarda tres días para estar listo para el consumo. Si es levante, requiere el doble de tiempo para que esté curado. 

Al principio de la temporada, cuando empiezan a verse los primeros volaores en la calle, el precio por unidad suele estar en 2,5 euros. Luego, según va avanzando agosto, el precio va reduciéndose hasta llegar al euro por volaor. “Los volaores llevan vendiéndose desde que existe La Atunara. Se pesca artesanalmente y, si está bien salado, puede aguantar en la nevera todo el año al igual que la mojama”, explica Francisco.

A estas alturas de verano la pesca del volaor ya ha concluido y los vendedores sacan a la calle sus últimas existencias. Ahora es el turno de la temporada de la melva en La Atunara. Francisco afirma que los volaores requieren mucho trabajo y que apenas da para subsistir en verano. 

Romería marítima de La Palma

Algeciras celebra cada 15 de agosto la romería marítima de la Virgen de la Palma, que este año ha estrenado la catalogación de Fiesta de Interés Turístico de Andalucía. Unas 40.000 personas se desplazaron a la playa de El Rinconcillo para ver salir del agua a la imagen y acompañarla en su procesión.  

Foto: andaluciainformacion.es

La Virgen de la Palma, patrona de la ciudad, permanece sumergida durante todo el año dentro de una cueva en la bahía. Esta romería suele comenzar al alba, cuando los barcos engalanados salen del puerto y se adentran en la bahía para que los submarinistas del club de buceo El Estrecho rescaten la imagen. Una talla de 1,10 metros de altura, realizada por el escultor Nacho Falgueras en marmolina; que pesa unos 120 kilos, y que sustituyó en el año 2000 a la escultura original, desaparecida un año antes en las profundidades del mar. 

Foto: El Mero

Cada 15 de agosto, la comitiva sale del mar con ella a hombros y la lleva hasta la playa. La devoción hacia la Virgen de la Palma en Algeciras surge a finales del siglo XVII, cuando un barco procedente de Italia atracó en el puerto para refugiarse de un  fuerte temporal. Cada vez que el barco intentaba salir, un nuevo temporal se lo impedía. Llegaron a trasladar el cargamento a otra embarcación, pero volvía a ocurrir lo mismo hasta que decidieron sacar la imagen que llevaban en un cajón. Las aguas se calmaron y el pueblo interpretó que la Virgen insistía en quedarse. 

La romería marítima tal como y se la conoce hoy es una iniciativa de la Sociedad Federada de Pesca Deportiva El Mero, que en 1975 decidió realizar una réplica de la virgen y organizar esta procesión.

Capital mundial del polo

Sotogrande vuelve a ser este verano la capital mundial del deporte del polo. Las instalaciones del Santa María Polo Club acogen, desde el 25 de julio y hasta final de agosto, la 43 edición del Torneo Internacional Land Rover, la cuarta competición más importante del planeta. En ella están participando 33 equipos, 136 jugadores y más de 1.200 caballos. Un evento que prevé arrastre hasta Sotogrande a unas 70.000 personas para disfrutar del torneo. Este evento tiene un gran alcance mediático y se calcula que el retorno para este destino turístico sea de unos 17 millones de euros. 

La 43 edición del Torneo Internacional cuenta con las máximas estrellas de este deporte en los diferentes hándicaps. Muestra de ello es que la máxima categoría de este evento, la Copa de Oro Bulgari de Alto Hándicap, se la disputarán equipos que cuentan con seis de los diez mejores jugadores del mundo. Así, sobre las canchas del Santa María Polo Club cabalgarán sobre sus caballos por la bocha jinetes como Adolfo Cambiasso, Facundo Pieres, Juan Martín Nero, David Stirling Jr, Gonzalo Pieres o Nicolás Pieres. 

Adolfo Cambiasso en el Santa María Polo Club.

Sotogrande, ubicado en el municipio de San Roque, es una de las dos marcas turísticas internacionales con las que cuenta la comarca del Campo de Gibraltar. La zona acoge importantes eventos deportivos de polo, golf o vela. El de más calado mundial es este torneo de polo organizado por Santa María Polo Club, que quiere convertirse en la meca de este deporte. Para ello está trabajando en un ambicioso proyecto de ampliación que prevé una inversión de 1.500 millones de euros y la creación de 5.000 puestos de trabajo. El plan contempla la construcción de dos hoteles, 50 villas de lujo con atraques para embarcaciones o la puesta en marcha de un Distrito Equino siguiendo el modelo de Wellington, en Palm Beach (Florida, Estados Unidos). 

La ciudad del viento

Tarifa es conocida como la ciudad del viento. Miles de amantes del windsurf o del kitesurf acuden cada año para practicar estos deportes a sus playas, cuna de campeonas como Gisela Pulido o Marina Alabau. La moda surfera inunda sus calles, con infinidad de tiendas de las marcas más reconocidas. Pero Eolo no lo es todo en Tarifa, una tierra que reúne infinidad de atractivos. 

Cometas de kitesurf en la playa de Los Lances.

Este municipio cuenta con algunas de las mejores playas de España y del mundo. Kilómetros de costa de arena blanca bañada por el Atlántico. La ensenada de Bolonia esconde un tesoro, el conjunto arqueológico de Baelo Claudia, la antigua ciudad romana famosa en todo el imperio por sus conservas y salazones. Una tradición pesquera que se conserva en la actualidad y que tiene su mejor exponente en la almadraba que se monta cada año para la captura artesanal del atún rojo. 

Tarifa también es un destino privilegiado para el turismo ornitológico. Expertos acuden a esta zona para la observación de aves en sus rutas migratorias desde África. En este municipio se mezclan las aguas del Atlántico con el Mediterráneo a través del Estrecho de Gibraltar, lugar perfecto para el avistamiento de cetáceos a través de viajes en barco. Asimismo, desde su puerto se puede viajar a Marruecos a través de la ruta marítima con Tánger. 

Tarifa también es historia. Cuenta con una fortaleza califal del siglo X donde se recrean las hazañas de personajes como Guzmán el Bueno o Sancho IV el Bravo. En su casco histórico se entremezclan calles estrechas donde uno puede perderse entre tiendas y bares, que ofrecen la mejor gastronomía típica de esta tierra. Su gente es amable y siempre ejerce de gran anfitrión para los visitantes.  

Una comarca única

La comarca del Campo de Gibraltar es única por su situación geográfica. Enclavada en el sur de España, en la provincia andaluza de Cádiz, es la puerta europea al Estrecho de Gibraltar. Desde su litoral se puede divisar el continente africano, del que está separado por apenas 14 kilómetros de agua. Su extensa costa está bañada tanto por el mar Mediterráneo como por el océano Atlántico. Asimismo, cuenta con la bahía de Algeciras, con una intensa actividad tanto industrial como portuaria. Este territorio dispone de una gran riqueza natural; no sólo por formar parte de la Reserva de la Biosfera, sino porque en su mayoría está ocupado por los parques naturales de El Estrecho y Los Alcornocales. 

El Campo de Gibraltar está formado por siete municipios: Algeciras, La Línea, San Roque, Los Barrios, Tarifa, Jimena y Castellar. Su población ronda los 250.000 habitantes. Su potencial turístico es enorme y cuenta con marcas reconocidas a nivel internacional como Tarifa y Sotogrande. Un abanico de atractivos al que hay que añadir -junto a la cercanía de Marruecos- la presencia británica de Gibraltar, que dota a la zona de una mayor singularidad si cabe. 

El Estrecho de Gibraltar, con Europa a la izquierda
y África a la derecha.

  

Todos estos factores hacen que en sus calles confluya un crisol de culturas, que conviven en armonía. Su ubicación la ha hecho testigo de relevantes hechos históricos, con importantes vestigios romanos y musulmanes, lo que ha motivado que muchos viajeros se hayan hecho eco de su idiosincrasia en diferentes guías y reportajes. En definitiva, una comarca digna de ser visitada, compartida y disfrutada.